Así es.

Una vez hayas reservado tu plaza, te enviaremos toda la información para que puedas abrir tu cuenta en la plataforma formativa.

De esta manera, podrás trabajar en tu desarrollo personal y profesional desde cualquier parte del mundo.

Solo necesitarás una conexión a internet.

Esta formación está diseñada para que se pueda seguir en tres meses.

Sin embargo, somos conscientes de que cada persona es un mundo.

¡Y solo faltaría que te agobiaras por esto!

Puedes realizar la formación a tu ritmo.

En cualquier momento y en cualquier lugar.

Y si necesitas más de tres meses para completarla —o en el futuro te gustaría volver a verla—, no hay problema.

Tendrás acceso para siempre.

Aunque me encantaría decirte que sí, no puedo prometerlo.

Esta es una herramienta de trabajo en ti mismo y, como tal, tendrás que ponerla en marcha.

La clave está en entenderlo como un gimnasio.

Por mucho que te cuenten un entrenamiento, sino aplicas lo aprendido, no conseguirás resultados.

Aquí ocurre lo mismo.

Es más importante aplicar que cualquier otra cosa.

Me alegra que me hagas esta pregunta.

Probablemente si alguien ve mis vídeos constantemente es que no está viviendo con entusiasmo.

Sigue buscando ahí la clave… pero hay algo que le falta.

La diferencia entre alguien que vive con entusiasmo y alguien que ve mis vídeos una y otra vez está en la puesta en práctica.

El programa está diseñado para que todas esas claves que has escuchado puedas ponerlas en práctica.

Todos los conceptos del programa están basados en tres principios:

• Simples.
• Prácticos.
• Efectivos.

No buscamos darte conocimientos nuevo, necesitamos práctica. Es decir, queremos recordarte lo que tú ya sabes que es importante y ayudarte a ponerlo en práctica.

Buscamos ese momento en el que tu cabeza haga clic.

Somos partidarios de un objetivo a objetivo. Cada módulo tiene una duración de 45 minutos a la semana. ¡45 minutos! Y en España dedicamos 4 horas al día a ver la televisión.

Invertir en ti y en tu crecimiento personal es la mejor inversión que quieres hacer. Uno tiene tiempo para lo que le interesa hacer y por eso yo no me pierdo un solo partido del Barça.

¡Por supuesto!

Los factores genéticos no los podemos cambiar, pero lo que hacemos con esos factores sí.

¿Verdad?

Eso es lo importante.

Decidir cómo quieres hacer lo que quieres hacer.

Si lo has intentado muchas veces y piensas que no es así, ¡no tienes razón! El mérito no está en conseguirlo, sino en seguir intentándolo una y otra vez.

La pregunta es si tirarás la toalla y seguirás intentándolo.

Eso es.

Porque no se trata de comprender una idea y ya está, sino que el día a día a la hora de aplicarla cuesta. Hay que repetirla hasta que forme parte de tu manera de ser. Es una inversión en uno mismo.

Necesitamos parar para reflexionar.